Hace varios días no me siento bien de salud y hoy para rematar tuve un gran disgusto después del cual mi día terminó de joderse. El dolor de cabeza que me había empezado en la mañana en la tarde se hizo insoportable, haciendo que me sintiera peor tanto anímica como físicamente. Lo que provocó que mi buen humor se fuera a la mierda y para no herir a nadie (aunque alguien se lo mereciera) decidí acostarme.
Unos instantes antes de encerrarme en mi cuarto recibí la llamada de mi mejor amiga, para ponernos de acuerdo sobre algo que tenemos en mente. Hablé poco y seco, me interrumpió y preguntó qué me pasaba, a lo que contesté que nada y continúe la conversación donde ella la había interrumpido. A los pocos instantes me volvió a preguntar y esa vez ni le contesté, continúe hablando sobre el tema que nos ocupaba, la escuché sonreír y dijo “está bien, después te llamo”. Colgamos y me acosté.
No pensé en volver a hablar con ella hoy y mucho menos en verla porque sé que por estos días está complicada y yo no estaba de humor. Cuando estoy así a veces prefiero encerrarme, tal vez no es lo mejor pero a veces lo hago. Dormí alrededor de cuatro horas aproximadamente. Cuando desperté, encontré una nota sobre este mismo teclado, era suya, empezaba así: “Vine a verte porque me quedé preocupada…”. Sonreí y recordé una frase de Sir Fracis Bacon: “La amistad duplica las alegrías y divide las angustias por la mitad”. Sólo le bastó escucharme al teléfono para saber que algo no andaba bien y como no obtuvo respuesta a su pregunta vino a verme, me vio dormida y no me despertó, confirmó que estaba bien de salud, eso le ratificó que el problema era otro y un poquito más tranquila, escribió su nota (que al final decía “¡me llamas!”) y se marchó.
AMIGA, tan solo cinco letras que con sinceridad encierran un universo. Dicen que los verdaderos amigos se cuentan con los dedos de una mano (a mi me sobran dedos) pero es la verdad. Las amigas son personas que nos acompañan incondicionalmente en los buenos y malos momentos, a quienes les confiamos nuestros secretos, recurrimos cuando necesitamos ayuda y con quienes nos desahogamos cuando todo parece ir mal. Una amiga es esa persona con la que puedes pensar en voz alta, es quien lo sabe todo de ti y a pesar de ello te quiere. La amistad es el ingrediente más importante en la receta de la vida.
Siempre se ha dicho que a medida que el ser humano avanza en la vida, crece y madura va adquiriendo amistades más sólidas y duraderas, eso que el dramaturgo venezolano Isaac Chocrón llamó: “La familia escogida”. Los amigos son necesarios, a ellos los empleamos para revelar cosas innombrables frente a nuestras familias o parejas, les pedimos consejos, los justificamos, somos cómplices y saben todo por cuanto pasamos tratando de ser mejores seres humanos.
A veces encontramos una amistad especial: ese alguien que al entrar en tu vida la cambia por completo. Que te hace reír sin cesar, te hace creer que en el mundo existen realmente cosas buenas, que te convence de que siempre hay una puerta lista para que tú la abras. Esa es una amistad eterna... Cuando estás triste levanta tu ánimo, te ayuda en los momentos difíciles y de confusión. Si te alejas te sigue, si pierdes el camino te guía, te lleva de la mano y te dice que todo va a salir bien. Cuando tienes una amistad así te sientes feliz y satisfecha porque no tienes nada de qué preocuparte, sabes que para lo que venga siempre habrá alguien a tu lado. Tener una amiga, saber que contamos con unas manos que aplauden nuestros triunfos o se tienden de apoyo en la derrota, es saber que alguien nos acepta con todas nuestras virtudes y defectos, es desechar de nosotros la vergüenza que nos puede causar la imperfección humana, es tener la certeza de no estar solos jamás.
Como eres una de mis seguidoras constantes, sé que estás leyendo esto amiga mía, y quiero que sepas que tú eres realmente especial, una amiga y una hermana aquí en mi corazón. Siempre estás conmigo cuando te necesito, lo mismo cuando mi vida reboza de alegría que cuando mi corazón ha sido maltratado. Tu amistad me llena de orgullo y espero que así sea a través de los años. Nunca cambies tu manera de ser, entre mi modestia y el tiempo nunca te digo cosas que quisiera. Eres sincera, alegre, siempre dispuesta a ayudar, eres el pañuelo que seca mis lagrimas de desventura o de alegría. No nos une un lazo de sangre pero si un solo corazón y la misma tierra, el mismo cielo y el sol.
Tú, mi amiga, siempre me acompañas, eres un cariño sincero que llega a mi corazón, somos “uña y carne” como dice la gente, tu lealtad y tu nobleza hicieron que te “eligiera” como la mejor, creo que nadie podrá destruir este sentimiento de amistad incondicional que nos entregamos… Reímos, lloramos juntas cuando necesitamos aliviarnos, somos confidentes, cómplices, hermanas. Si crees que algo va mal (como hoy) sales de tu casa en busca de mi sonrisa que no sabes por qué se apagó. Eres capaz de coger mi mano para calmar mi desaliento y llorar conmigo sintiendo mi quebranto... Tu me haz dado el más preciado de los tesoros: tu corazón… y el más bello de los regalos: tu amistad (que es más firme que los contratiempos).
Siempre quise poder confiar ¡de verdad! en alguien que me supiera comprender, aconsejar, una amiga como tú… gracias por haberme dado lo que yo esperaba de ti, por la paciencia y sabiduría que me das, por tu silencio cuando debes callar, por tus regaños cuando debes hablar, me das tu hombro para llorar, tus palabras para reconfortarme, tu mano para levantarme y caminar... tu amistad me enseñó mucho, es mi remanso porque cuando algo está mal recurro a ti (sabes que no lo hago con nadie)... no eres una amiga más, eres mi mejor amiga, ¡la más especial!
Mucha gente entra y sale de nuestra vida, pero solo los amigos verdaderos dejan huellas en el corazón. Amiga es la que te espera cuando estas ocupada, que te ayuda en los momentos difíciles, que te saca de los “apuros”, que te lleva una sonrisa cuando todo está de cabeza, que sabe perdonar cuando el ego te confunde… todo eso y mucho más es una amiga, y todo eso ilimitado eres tú. ¿Sabes que el día que te conocí fue un día feliz para mí? Hacía mucho tiempo no confiaba en nadie, pero aquel día cuando llegaste a mi casa… conversamos, te hice un café, hiciste el trabajo al que venías y tuve la certeza (cosa rara, no por ti sino por mí) de que seriamos buenas amigas.
Cuántos años tuvieron que pasar para que la vida nos pusiera una frente a la otra, sin embargo después de conocernos, en un tiempo casi record, empezaste a estar presente en cada momento importante de mi vida, me has dado la oportunidad de compartir mis alegrías y tristezas contigo. Nuestra amistad se alimenta con un gran y profundo cariño, que se ha extendido a nuestros hijos.
Gracias por animarme y acompañarme, por regalarme con tu presencia esas horas de alegría que tan rápido pasan estando en tu compañía… por todos los momentos que hemos compartido llenos de sentimientos, sueños, anhelos, secretos, risas y lágrimas… por dedicarme tiempo para demostrar tu preocupación por mí y sobre todo tiempo para mostrarme tu afecto, por ser una persona maravillosa… gracias por venir hoy, aunque no nos vimos tu nota me dijo más que tus palabras… ¿Cómo podré expresarte todo el cariño que te tengo? Creo que nunca lo haré, sabes que no soy buena para esas cosas. Quiero que esta amistad nunca termine y te aseguro que cada preciado segundo que hemos pasado juntas quedará atesorado eternamente en mi corazón. Nunca recibí tanto ni le di tanto a nadie. Por lo mucho que valoro tu amistad te escribo hoy lo que sale desde lo más profundo de mi alma.
CARY, AMISTAD SINCERA Y VERDADERA ES ¡
Teneis una suerte de puta madre, luchen por conservar esa amistad para que nada las separe, amigas asi hacen mucha falta y no son faciles de encontrar.
ResponderEliminarEntre ustedes siempre es así, una corre junto a la otra a la más mínima señal de que algo no anda bien. Cary y tu son un dúo dinámico, no sabes cuanto me gustaría verlas juntas, deben ser magníficas y subyugantes, con esa malicia, alegría y complicidad que las une. Dices que no sabes como expresarle todo el cariño que le tienes y lo que significa su amistad para ti, yo creo que no hace falta, con que te lea es más que suficiente porque ella es una mujer inteligente igual que tu. Por lo que conozco de ella sé que no se iba a quedar con la espinita de la duda de lo que te pasaba por eso fue. Su amistad te hace mucho bien y me imagino que tu a ella también porque poder contar incondicionalmente con alguien tan especial como tu es una bendición, además saber que tu no eres una persona que confía fácilmente en cualquiera le da dimensión mayor a esa amistad.. Cuídense mucho una a la otra como siempre hacen, no dejen que esa bella y gran amistad que comparten se dañe con nada. Mis pensamientos más positivos están con las dos.
ResponderEliminareso es verdad sin las amigas no podemos estar, x eso las mías no las abandono y cuando una de las tres pide reunión las otras abandonamos todo porq algo grfande pasa, bueno o malo.
ResponderEliminarLa amistad es uno de los sentimientos mas bellos que unen a los seres humanos, ojaka tods las personas pudieran contsr con una amistad verdadera. Las muejeres son un fenóenemo cuando tienen amigas verdaderas, nosotros para conquistar a una mujer tenems que consquitar a la amiga también porque es alguien que estará siempre a la sombra esperando que hagas algo mal y basta que sienta que dañará a su amiga para que salte sobre ti a destrozarte. Si su amiga es feliz ella te amará, si no lo es pobre de ti.
ResponderEliminarLa verdad es que cuando una mujer encuentra a una verdadera amiga como son ustedes dos no hay tarea imposible, no hay dolor eterno, no hay problemas sin solución y en pago si muchas alegrias. Yo también tengo una amiga que es mi hermana a la que de cariño le digo disturbio por los revolicos que forma en mi casa y la manera que tiene de inventar planes que nada tienen que ver con la planificacion que hasta ese instante tenía en mente, pero es asi, luego somos las mas divertidas y felices y no te niego que a veces es ella la que dice que yo soy la culpable de no haber llegado a tiempo a su casa.Ella sabe que yo la quiero mucho y que siempre podra contar conmigo en todo,ya no me imagino mi vida sin ella,es leal y sincera como nadie y le doy gracias a Dios por permitir que nos conociéramos.Cuando existen amigas como la tuya y la mia la alegria se duplica y los contratiempos pesan menos
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