jueves, 9 de febrero de 2012

La intuición femenina: ¿tenemos un sexto sentido?

Según la Real Academia Española, la intuición es la “facultad de comprender las cosas instantáneamente, sin necesidad de razonamiento”; también, una “percepción íntima e instantánea de una idea o una verdad que aparece como evidente a quien la tiene”.

En cuanto a las mujeres este es un tema que ha despertado ambivalencias a lo largo de la historia. Unos dicen que existe el sexto sentido en las mujeres mientras otros manifiestan que es sólo un mito. Pero lo cierto es que la mayoría de las mujeres nos manejamos por sus intuiciones, y casi nunca nos equivocamos. Esa especie de sexto sentido nos avisa que una persona no es buena para nosotras, que determinada historia no es como la cuentan, que en determinado asunto hay “gato encerrado”, entre otras cuestiones de la vida cotidiana.

Pero que las mujeres tenemos un sexto sentido es vox populi, es una construcción popular tan poderosa que ya no se cuestiona. Dice un amigo que las mujeres somos criaturas esencialmente empáticas, telépatas, expertas en gestualidad, escrutadoras de los estados emocionales y demás.

Nuestra extrema capacidad sensorial nos permite identificar casi instantáneamente lo que ocurre, por ejemplo fíjense que en un salón lleno de personas las mujeres después de entrar en menos de 10 minutos ya saben la relación entre cada una de las parejas que hay en el lugar, cuales son las parejas que se llevan bien, las que han tenido una discusión, quién está intentando algo con otra persona o quiénes son las mujeres competitivas y quiénes son las simpáticas. Sin embargo, en el caso de los hombres, cuando entran analizan la sala buscando las entradas y las salidas, busca caras que le resulten familiares o posibles enemigos, examina la distribución de la sala, su mente lógica analiza lo que está roto y necesita repararse. Cuando los hombres terminan de hacer su análisis visual ya nosotras hemos analizado cada una de las caras de la sala y sabemos quién es quién y cuáles son sus sentimientos.

Ya sea por genética o educación, nosotras tenemos una capacidad especial de percepción más desarrollada que los hombres. Por tradición, nos han enseñado el estar más pendiente de los demás, asimismo, a darle más importancia a la comunicación que a la acción. No olviden que los especialistas dicen que a los mensajes no verbales hay que prestarles más atención, porque ellos son menos controlables a nivel consciente y en ellos reside la mayor carga informativa sobre emociones y sentimientos de una persona.

Y pensar que durante siglos se quemó a las mujeres en la hoguera por poseer “poderes sobrenaturales” entre los que se incluían la habilidad para predecir el destino de una pareja, para descubrir a mentirosos, para comunicarse con los animales y descubrir la verdad.

En el cerebro existen los hemisferios izquierdo y derecho: el primero desarrolla el pensamiento racional, mientras que el segundo el pensamiento emocional. Está comprobado científicamente que el primero está más desarrollado en los hombres, mientras que ambos hemisferios lo están en la mujer. Por algo nos llaman brujas, y en muchas ocasiones no es por las maldades que hacemos, sino por las cosas que llegamos a advertir.

Los hombres a veces se preguntan: “¿Por qué no se le puede mentir a una mujer?”. Pues bien, sepan que el óptimo equipo sensor de las mujeres detecta y analiza la información y, gracias a la extrema rapidez de su cerebro para transmitir información de un hemisferio a otro, es mucho más hábil para integrar y descifrar señales verbales, visuales y de cualquier otro tipo. Esa es la razón de que muchos hombres tienen grandes dificultades para engañar a sus mujeres cara a cara. En cambio a la mayoría de las mujeres les sería bastante fácil mentirle a un hombre, ya que ellos carecen de la sensibilidad necesaria para detectar incongruencias entre el mensaje verbal y corporal. Si un hombre le miente a una mujer, lo más seguro es que lo haga por teléfono, por carta, con las luces apagadas, con el rostro volteado para no mirarle a la cara o con algo por encima de la cabeza.

En mi caso por ejemplo no solo "calo" a las personas enseguida sino que ese sexto sentido en ocasiones va más allá y puedo saber de forma intuitiva cuando algo anda mal o cuando algo puede funcionar o no... Pero no se asusten, no soy una bruja ni nada parecido solo soy una mujer ¡y eso es suficiente!

7 comentarios:

  1. Estais en lo cierto el sexto sentido que SI tenemos permite salvarnos de muchas cosas y gentes.

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  2. Si, ustedes son increibles lo que no saben se lo imaginan con una rapidez que a veces atemoriza, yo por lo menos no le miento a las mujeres, porque si alguien es capaz de cogerte muy fácil de atrás para adelante es precisamente una mujer y si es inteligente , por favor ni que decir. Es preferible hablarle con la verdad por dura o mala que sea, aunque le duela pero es lo mejor para los dos, para ella porque en el fondo termina agradeciendo que no le mintieras y para ti porque cuando descubra que fue engañada corres el riesgo de desatar una gran tormenta, y de acuerdo a la mentira así será su furia. Cuidate.

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  3. ¡Diablos! para mentirle a una mujer hay que estar loco, Frank tiene razón y tu también. Para mi las mujeres tienen no sexto sentido sino como ocho y si son inteligentes mucho más. Cuidate linda.

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  4. jajajajaja es verdad que nacimos con ese don y si ademas poseemos mas de dos neuronas funcionando al máximo somos el mejor sensor, pero fijense con los maridos tenemos un ojo finisimo para detectar cualquier anomalía, pero esto ocurre tambien con los hijos, con los verdaderos amigos.
    Esta intuición femenina es tan fuerte con las personas que nos interesan que es dificil ocultar por mucho tiempo cuando está no está bien.

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  5. Me parece super interesante.. Yo personalmente creo que tenemos un sexto sentido, algunas más que otras, y en muchos casos me he llevado algún fiasco por no seguir lo que me decía esa vocecita... :)

    Te dejo un link que creo que puede interesarte, es el blog de un escritor que recientemente ha lanzado una novela llamada Yo, Úrsula... Es interesantísimo porque se pone en nuestra piel como mujeres, aun siendo un hombre. Te recomiendo que te pases, creo que te puede gustar!

    Un saludo :)
    Guillermina

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  6. Ups, perdona, me he despistado, aquí está el link.

    http://richarelatos.blogspot.com/2012/02/yo-ursula-y-la-mujer-profesional.html

    Acabo de ver que están realizando un concurso en la página de fans de la novela, en Facebook, y sortean la novela. Yo me la compré hace un tiempo en Amazon, lástima jeje

    Un saludo!
    Guillermina

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  7. Sí vale, los hombres somos unos monos, ustedes son la perfección andante, pues bien , háganse lesbianas entonces. Total, no somos útiles. ¿Para qué nos quieren? Somos unos estorbos...

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