Bienvenidos a este humilde pero sincero espacio. Aquí escribo mis pensamientos, cosas que me preocupan, algunas vivencias, historias que conozco... lo que me dicta el corazón para compartirlo con otras personas, es una manera de saber que no estamos solos en este mundo virtual y poder hacerlo más real y cercano. Me gusta escribir y me siento bien haciéndolo, ojala estás letras lleguen a ustedes como yo quisiera. Siéntanse libres de comentar lo que deseen. Gracias por estar aquí.

martes, 30 de agosto de 2011

El poder de las palabras





Es lindo y fascinante el mundo de las palabras y su maravillosa dinámica que permite la expresión del pensamiento, aunque nunca sabes si tus palabras despertarán sentimientos en personas insospechadas. Hay palabras que alientan y alegran cuando son sinceras y expresan los verdaderos sentimientos, hay otras duras que lastiman, otras nos dicen la verdad “sin anestesia” pero con buenas intenciones para que consideremos mejor nuestra actitud frente a la vida.

También hay palabras vacías dichas por compromiso y que no transmiten nada, otras dejan huellas en nuestras vidas, hay palabras justas que a veces queremos y necesitamos escuchar y nunca llegan, existen muchas que dan tranquilidad y paz, palabras que tienen nobleza, autoridad y sabiduría… A veces queremos expresar sentimientos y no encontramos las palabras exactas y apropiadas para describir lo que sentimos.

Me gusta atar las palabras con lazos sencillos para que se puedan comprender mejor pero no siempre me salen todo lo claras que quisiera porque es muy difícil plasmar con palabras las sensaciones, los sentimientos, no puedo describir el deseo. Me gustaría convertir mis sensaciones en palabras y que al ser leídas se volvieran de nuevo sensaciones, intactas, sin perder un ápice de su intensidad en esa transmutación literaria. Pero no es posible, las verdaderas sensaciones quedarán dentro de mí, en un intento de hacerlas salir. No puedo describir con exactitud lo que siento ahora, lo que sentí ayer, no hay palabras, no hay frases, y si las hay, yo no puedo encontrarlas ni crearlas.

Escribo y describo lo que siento, lo que me sale del corazón, experiencias, pensamientos, historias... es importante aprender a escuchar el mensaje que esconden las palabras por eso cuando leas las mías no te pierdas en ellas sino encuéntrate en cada una, porque muchas veces es un lenguaje que no es entendido por la razón pero si quieres ver mis palabras desnudas léelas con el corazón porque sólo él es capaz de desnudar los sentimientos y entonces las entenderás.

Muchos dicen que las palabras se las lleva el viento (aunque en lo particular no lo creo así) pero por eso me gusta escribir, a veces pienso que este sitio es un nido de palabras que sirve para acortar distancias entre personas que conozco y entre muchas que tal vez no conoceré nunca, pero que a través de las palabras nos ayudamos y nos entendemos. Para algunos tal vez no tengan sentido, incluso puede hasta molestarles mi forma de pensar y de expresar pero a otros sé que los hacen reflexionar, los ayudan a esclarecer sentimientos y eso es lo que importa.

En ocasiones me gustaría que mis palabras fueran mágicas y que al pronunciarlas o cuando las escribo fueran como un conjuro que obrara maravillas, por ejemplo que borraran la tristeza de un rostro, que restituyeran ilusiones perdidas, que curaran heridas en los corazones… que fueran como el eco de lindos recuerdos que trajeran a la memoria, besos, rostros y los “te quiero” que todos guardamos en el alma como tesoros. Pero lamentablemente no son mágicas son solo palabras, sentidas, amorosas, sensuales, fraternales… por eso me gustaría que al leerlas las dejen llegar a su interior y las sientan, solo así podrán causar su efecto y se darán cuenta de que es el idioma que maneja mi corazón hacia el propio corazón de quienes puedan leerlas.

Hay momentos en que somos tímidos para expresar el amor que sentimos y dudamos mucho para decir: "Te quiero", entonces tratamos de comunicar la idea en otras palabras. Por ejemplo: "Cuídate", "Pórtate bien", “Te extraño”, “La paso muy bien contigo”. Pero en el fondo son diferentes maneras de decir "te quiero", "eres importante para mi", "me importa lo que te suceda"… A veces los seres humanos somos muy extraños… la única cosa que queremos y debemos decir es la única que NO decimos. Pero como el sentimiento es real y la necesidad que tenemos de decirlo es tan fuerte, usamos otras palabras pero lamentablemente muchas veces el significado nunca se comunica del todo y la otra persona no se entera del verdadero sentimiento que le profesamos.

Las palabras explicitas son necesarias pero también tenemos que aprender a escuchar el amor en las palabras que las otras personas nos dicen o no nos dicen, por ejemplo un abrazo o un beso impulsivos, dicen "te amo", aun cuando las palabras digan algo diferente. Cualquier expresión de preocupación de una persona por otra dice "Te Quiero". Un obsequio inesperado dice “No dejo de pensar en ti”. Debemos mirar y escuchar muy atentamente el amor que contiene cada gesto o cada palabra por simple que nos suene.

A veces incluso somos capaces de demostrar el amor cuando nos mantenemos en silencio. Por eso tenemos que aprender a escucharlo y sentirlo para que podamos ver el amor que está debajo de la superficie. Si aprendemos a hacerlo descubriremos que somos mucho más amados de lo que pensamos. Cuando escribo derramo mis pensamientos, a veces salen puros y cristalinos como el agua de un manantial, otras veces turbios como en un lodazal pero llenos de sinceridad y amor… a veces surgen frases, metáforas algunas veces afortunadas, pero cada escrito es como mi sangre porque brota de mis adentros, de lo más profundo de mi alma.

Hay palabras que mueven mundos, que producen terremotos... que hacen temblar y vibrar... que provocan escalofríos, que estremecen, que hechizan… palabras cómplices dichas al oído, palabras apasionadas y repletas de amor que acarician y enaltecen, que enamoran, que provocan… aunque cómo plasmar en palabras un abrazo o cómo describir todos los besos que ahora quisieras dar, apasionados e intensos.

¿Sabes que muchas veces tú eres el motivo y el destino de cada uno de mis escritos? Te imagino leyendo, devorando cada una de mis palabras, sintiéndome aun en la distancia. ¿Qué puedo decir?, si me gusta escribirte, yo creo que es porque a veces mi corazón no da latidos sino que estalla, y en un instante llega la sangre a todos los rincones y hace que surjan esas letras, como si todas estas palabras fueran mi sangre metamorfoseada. Mis palabras dejan huellas en tu memoria como la dejas tú en mi alma.

A veces son suficientes unas líneas inesperadas para emocionar un alma, no hace falta buscar palabras bonitas, muchas veces dos líneas resuenan durante horas como el eco más precioso jamás oído porque unas líneas bastan para expresar sentimientos, y pueden no ser literarias pero dicen más que un libro entero. En ocasiones lo más sencillo es, sencillamente, perfecto, y queda para siempre en el recuerdo porque son como un beso inesperado que transmite mil sensaciones a la vez.

Quiero que me sientas a través de mis palabras, que te inunden por un instante como si nada más existiera, que te provoquen, te hagan desear, soñar, recordar, que sientas que te acaricio cuando escribo, que el fuego te recorra por dentro cuando escribo que me posees. Quiero que necesites leerme, que busques cada día mis escritos y que los leas tranquilo, que los disfrutes, que los hagas tuyos porque realmente lo son aunque le sirven de inspiración a otros, son nuestros.

Quisiera escribir infinitos párrafos para explicar cada sentimiento, cada momento, cada deseo, cada uno de mis sueños. Párrafos intensos, tiernos, exuberantes, tímidos, lascivos, poderosos, sencillos, llenos de exceso, de besos y de caricias con las que cubriría tu cuerpo si ahora pudiera. Párrafos escritos dejando volar mi imaginación para que al leerlos seas tú el que vueles, el que imagines y sueñes. Ojala mis palabras nunca cesen, que sean una eterna lluvia de frases expresando sentimientos, que tampoco cesan, fluyendo tumultuosos buscando su destino, que eres tú.

Sé que te hago sentir a través de mis palabras, que llegas a emocionarte, que me clavo cada vez más como afilada daga en tu pecho desnudo, ese que tú me has mostrado sin escudo ni coraza. Te hago vulnerable, preso de mil sentimientos, pasiones, deseos… te pones ansioso y voraz. Con mis palabras tapizo el camino que hemos recorrido, escritos que como espejos reflejan un pedacito de mi yo, de mi amor por ti, de tu amor por mi, de este amor tan nuestro.

4 comentarios:

  1. Al leer lo que escribes me siento identificado contigo, tal vez sea porque en este mundo existen los corazones únicos, originales, personas que son capa-ces de ser ellas mismas y expresar todo lo que sienten tal y como lo siente su corazón, por eso te doy las gracias por darme la oportunidad de poder leerte y creo que muchos de los que vienen a este sitio piensan y sienten igual, aunque no lo digan. Tu transmites mucho, cada palabra se siente en lo más profundo.

    ResponderEliminar
  2. amiga tus palabras reconfortan el alma no lo dudeis, conmueven y hacen re-flexionar. gracias por permitirnos conocer sentimientos tan lindos y reflexiones tan certeras.

    ResponderEliminar
  3. Me encanta como escribes y tus palabras me hacen recordar muchas cosas que he vividoy en ocasiones me veo reflejada en ellas. No dejes de esribir que nos hace mucho biern leerte. Hasta algunas cosas tristes que has escrito me han conmovido y se que a otros les ha ocurrido lo mismo, ese es el poder verdadero de las palabras, saber llegar al corazon.

    ResponderEliminar
  4. Cuando te leo siento tantas cosas que nunca podré explicártelas lo único que puedo decirte es que cada una de tus palabras me confirman que eres lo mejor que me ha pasado en la vida, nunca nadie me ha hecho sentir lo que tu me haces sentir. Solo puedo hacerter sentir mi amor eterno en cada beso ardiente que tu boca me regale, morir al ser tu amante, ser tu rey y que sientas que eres mi diosa; tu mi brújula, yo tu marinero, tú el alma que calma mis luchas en la gue-rra de la vida, eres mi principio y mi fin, no te haré promesas eternas no son necesarias ni lógicas, ya has tendido cadenas de rosas atadas a mi corazón, a mi cuerpo y a mi mente. Ya podría caer muerto, inerte porque he tenido la dicha de amarte y de diluirme en ti, soy capaz de esperar toda la eternidad, atado a tus caderas y a tu existencia porque ya irremediablemente soy tu esclavo. Tu amor me consume y me enaltece, ¡bendita seas mujer!

    ResponderEliminar