Bienvenidos a este humilde pero sincero espacio. Aquí escribo mis pensamientos, cosas que me preocupan, algunas vivencias, historias que conozco... lo que me dicta el corazón para compartirlo con otras personas, es una manera de saber que no estamos solos en este mundo virtual y poder hacerlo más real y cercano. Me gusta escribir y me siento bien haciéndolo, ojala estás letras lleguen a ustedes como yo quisiera. Siéntanse libres de comentar lo que deseen. Gracias por estar aquí.

martes, 11 de junio de 2013

Eres mi alfa y mi omega



“Déjame recorrer tu piel y sabrás lo que es amar”… Fueron tus palabras aquel día y caí en las aguas turbulentas de un río que jamás encontraría su cause. Probé tu piel y la dulzura quedó para siempre impregnando mis sentidos hasta llegar a convertirse en mí mayor peligro. Y no puedo alejarme aún sabiendo que naufrago a cada instante cuando te amo.
Arrastrada por el agua caliente de tu amor se cuela el cafecito mañanero que despierta mi paladar y mis sentidos, y sin pensarlo respondo a tus antojos como la arena al huracán, trasladándonos a un espacio tuyo y mío… de nadie más.

Este sentimiento nació sin planearlo, sin pensar en ninguna estrategia… fue todo tan natural… Y ahora es como una obra de Miguel Ángel, majestuosa en su formato y sublime en su contenido. Amor a medio tiempo que nos dignifica y nos lleva al pecado, amor de siempre… robado en las mañanas, alimentado en las tardes y entregado en las noches.
Marinero que llegaste a mi vida con el blanco de la espuma de tus mares e impregnaste mis días de ilusiones y esperanzas. Me atrapaste en tus redes para no escapar de tu alcoba y tu lecho tibio. Ámame por el resto del tiempo que me quede en tu historia. Hemos perdido la brújula y ya no hay norte ni este ni oeste, solo el sur de mi silueta aguardando ser bañada por la furia de las olas de tus inquietudes y deseos.
Me has hecho feliz, tienes magia, tienes luz, eres mi alfa y mi omega, mi principio y mi fin, mi paz y mi guerra... de solo pensar en ti sonrío... me miras y haces volar las miles de mariposas que anidan en mi vientre... porque siento tu amor en cada palabra, en cada te amo, en cada juego, en cada mirar... esa conexión que hay en nosotros en pensar una pregunta uno y responderla el otro... o en mirarnos y saber cómo estamos por dentro, en la preocupación que tienes por mí o de decirme siempre la palabra justa... o cuando me dices que sabes cuanto te amo, o de esos suspiros que suelo robarte....
Así le damos riendas sueltas a lo que no queremos romper y con pinzas de cristal lo tomamos, lo usamos y lo volvemos a guardar en el cofre de los sentimientos nobles, esos que nacen sin pensarlo pero que no pueden apagar la luz porque cada vez que intentan hacerlo una llamarada nace de algún rincón. Cavaré mi tumba en tu lecho y el peligro extinguirá hasta la última gota de sudor que derramaré con ardiente pasión delirando con el fuego de tus labios, al condenarme yo misma al sabor a peligro que tiene tu piel donde me duermo eternamente con el amor.
Recuerdas cuando te dije que una de las cualidades que yo quería en un hombre era la capacidad de sorprenderme... bueno, tú lo haces constantemente... Y de veras no dejo de sorprenderme con tus acciones, con tus actitudes, con las cosas de las que eres capaz... y hasta disfrutar con una sonrisa mía o preguntarte porque no nos hemos encontrado antes... Yo soy feliz con saber que nos amamos, con oír tu voz, con saberte mío, con saber que soy dueña de tus celos, de tus sentimientos, de tu ternura, de tus pensamientos…
Este amor algo loco e irresponsable que ciñe sus manos a un futuro incierto, aviva la loca furia de mis labios y aunque no tengo un norte seguro me dejo arrastrar en las aguas de tus pasiones… me dejo llevar por tus razones y mis añoranzas y en febril encuentro deseado estallo con la verdad y confieso sin temor que contigo mi alma está de fiesta… y mi cuerpo brinda por ti.
El sabor del amor lo llevamos en el cuerpo y en el alma. La felicidad que me has regalado es comparada con el edén, es paz y amor. He aprendido a amarte como no pensé que se podía... Gracias por ser mi hombre y por permitirme amarte... Y así, viendo pasar el cielo de azul claro a oscuro retrasa mis horas en tus días.

5 comentarios:

  1. OYEEEEE, tu hombre tiene que estar que se derrite con todo tu amor, y tu ni te cuento, se ve que has encontrado como tu dices "tu alfa y omega" y creo que el también, felicidades amiga, un besote

    ResponderEliminar
  2. Preciosa, un amor así roba la calma y hasta hace perder la razón pero al mismo tiempo brinda alivio en la entrega, felicidad en el corazón y paz en el alma. No dejen que se extinga la llama.

    ResponderEliminar
  3. Una vez más me has dejado sin palabras...
    Sí Peter, arrastran sus pasiones pero ese amor es el alimento del alma y del cuerpo cuando saboreas el manjar de los dioses.

    ResponderEliminar
  4. Que lindo es q te sorprendan ymas q sea la persona q amas...disfruta cada diade ese amor. besos y muchas bendiciones!!!

    ResponderEliminar
  5. Precioso!!!! Amar y ser amado es lo máximo...Que dure una eternidad!

    ResponderEliminar