Siempre
sentí pasión por la lectura y la escritura, tanta como por el mar. Era tanto
así que durante años antes de salir de la casa revisaba mi bolso: monedero,
llaves, un buen libro, todo ese sin fin de cosas que nosotras las mujeres llevamos
en una cartera pero en la mía además no podía faltar un cuaderno y bolígrafo,
¡eso era indispensable! Porque cualquier momento es bueno para escribir un par
de ideas, copiar alguna bonita frase que te motive… en fin, hoy en día ya no lo
hago, ya no llevo un cuaderno en mi cartera, pero eso es algo que debo retomar,
sí, claro que sí. La tecnología no puede privarme de ese placer de en cualquier
lugar y momento plasmar en un papel lo que veo, escucho o siento.
Una
vez quise escribir historias sobre personas simples, sencillas, que luchan por
un mundo más justo y no salen en las noticias. Quería contar historias para escribir
un libro. No sabía bien cómo hacerlo ni dónde, lo único que tenía claro es que
quería escribir. Han pasado los años y aún no he podido contar esas historias,
ni escribir un libro, pero si he escrito muchas cosas y sigo escribiendo. Aunque
muchas veces lo hago para mí misma.
Cuando
empezó a darme vueltas en la cabeza la idea de crear un blog, tuve mucha incertidumbre, realmente
lo pensé mucho. Me decía: ¿quién va a querer leer lo que yo pienso sobre algo?,
¿a quién le interesa lo que me ocurre? ¿quién se va a interesar por mis sentimientos?
¿me visitarán si escribo de cosas cotidianas? Y sobre todo el tema más polémico
conmigo misma era si serían capaz de seguir visitando el sitio si yo publicaba textos
atrevidos, erotismo. En fin, era una indecisión constante y una lucha conmigo
misma, pero mientras más lo pensaba más me apasionaba.
Al
fin me decidí y escribí el primer post, y cuando presioné “Publicar” realmente
me sentí emocionada y temerosa, pero ya estaba hecho y solo restaba esperar la
respuesta de las personas, aunque sabía que no sería inmediata, que iba a
requerir tiempo y mucho trabajo. Esto me dio nervios y emoción. Tenía miedo a
las críticas, aunque afortunadamente no el suficiente para detenerme.
Y
no me he detenido, he tenido tropiezos, contratiempos, pero sigo aquí. Escribo
lo que vivo, no solamente lo que pienso y también cuento historias que conozco.
Escribo para sacar del pecho la vida, para expresar lo que mi alma siente y es
entonces que siento que mi alma vibra, por mis poros respiro felicidad cuando
las letras trasmiten plenamente lo que se alberga dentro de mi. Mantener este
sitio a veces se me hace difícil, pero no cejo en el esfuerzo porque me
apasiona y es muy gratificante. Además es una especie de vía de escape necesaria
en el día a día y me permite llegar al corazón de muchas personas, personas
increíbles. Cuando comencé aquí de algún modo quería iluminar el camino de esa
gente que no conocía pero sabía que estaban ahí.
Hay
cosas en la vida que uno sabe con certeza, y yo sé que necesito escribir,
necesito leer y estar junto al mar para ser yo misma y sentirme libre. La
escritura me hace libre, escribir me hace volar con mi imaginación a lugares reales
o imaginarios, a situaciones divertidas o duras… Las letras son mi escudo, mis
flechas al aire y una que otra al corazón, necesito hacerlo porque es aliento
de vida el escribir lo que pienso, lo que creo y recreo. Escribo lo que a gritos
notan en mis silencios, porque quiero vivir y que vivan conmigo, que me lean,
que me sueñen, que me suspiren... Quien busca la vida, quien quiere vivir se
dedica a escribir.
Escribir
y publicar no es lo mismo. Para mí escribir es una necesidad vital, absoluta.
No puedo vivir sin escribir. No puedo vivir sin hacer lo que me apasiona. Pero
muchas veces escribo y no lo publico por diferentes razones.
Hace
algunos años, un día me encontraba leyendo una novela romántica erótica y una
amiga me dijo “hay que tener mucha calle o imaginación para escribir eso, ¿te
atreverías tú?”, sonreí y solo dije “No sé, tal vez”. Pero la sola idea me
pareció un reto (no soporto los retos, me apasionan y la adrenalina me llega a
niveles insospechados), desde ese entonces entre todas las cosas que escribo me
gusta dejar un espacio para contar e imaginar historias atrevidas, románticas,
eróticas, apasionadas que no dejan nada a la imaginación. Y me envuelvo en mis
personajes, en sus vivencias, pasiones y frustraciones.
Cuando
escribo mis manos se deslizan por el teclado y van plasmando los sentimientos
que me nacen del corazón o pensamientos profundos que desnudan mi alma. En
ocasiones mis manos se quedan quietas, suspendidas en el aire, dudando de cómo
seguir, hasta que vuelven a deslizarse con lentitud pero con firmeza y
continúan en su trayectoria depositando en la pantalla trocitos de sentimientos,
modestas reflexiones, historias, bosquejos de sueños. Penas, alegrías, dolor,
llanto, amores, añoranzas… las letras dicen todo lo que mi corazón siente,
grita lo que mi boca calla, desnuda mi alma, da sentido a mi vivir, calma mis
penas, me transporta a un mundo donde puedo ser yo, sin máscaras, sin atavíos,
¿que sería de mi si no pudiera escribir? vivo cuando escribo, soy yo cuando lo
hago. En mis letras va el amor que llevo por dentro. Amor limpio, puro, dulce,
tierno y eterno.
Mis
queridos seguidores, hoy quiero darles las gracias desde el corazón a todos y
cada uno de ustedes, sobre todo a quienes de un modo u otro me hacen saber que
lo que escribo llega de algún modo, gusta, y que algunas veces esas vivencias o
historias que plasmo, son compartidas, mucho más de lo que imagino cuando las
escribo. Yo escribo para mí y para ustedes. Mis letras son vida porque seduzco sus
ojos con letras de pasión y acaricio su piel con palabras de deseo. Hacemos el
amor con palabras traviesas que tientan sus fantasías y mojan sus sentidos.
Escribo en sus silencios, en sus sueños más profundos, en este manto de cielo
azul que nos cubre y nos descubre, escribo para que esta vida sea menos lúgubre.
Gracias
por estar siempre y vivir desde mis más locas emociones hasta las más
dolorosas, esas que he dejado aquí con piel y todo, emociones en las que he
compartido mis alegrías, mi risa y algarabía... así como mis tristezas, llanto,
impotencia y frustraciones que vivo como mujer intensa que soy. Gracias a todos
esos que llegaron después y a los que aún no han llegado pero que están en
camino. Gracias a todos esos que me siguen en el anonimato, a todos los que me
comentan aunque no me sigan y a los que me siguen sin comentarme.
Cada
palabra es partícula de mí ser, un átomo de mí; escribir ya no es un gusto, es
una necesidad. Escribo no solo para vivir sino para no morir. Mi propia sangre
fluye en mis letras, respiro palabras y agito mis manos sobre el teclado en
fulgurante victoria contra la incertidumbre. Escribo toda experiencia de vida,
de sueños y de olvidos. Cuando me invaden las ganas de escribir me puedo quedar
largas horas incluso sin comer o dormir, pero eso no me importa porque en esos
momentos soy feliz. Estoy totalmente de acuerdo con alguien (desconozco su
nombre) que dijo: “sigamos haciendo esto que sabemos hacer y que no sirve para
nada, pero es tan útil; que no se come, pero llena; que no esta hecho con
ninguna tela, pero cómo abriga!”
Que
permanezcan aquí a pesar de mis ausencias hace que me sienta un poco en deuda
con ustedes, por ello, a pesar de las dificultades que se me presentan y el
poco tiempo que tengo disponible, seguiré aquí y les prometo hacer mi mayor
esfuerzo para no alejarme mucho tiempo de ustedes mis queridos lectores, mis
queridos amigos, virtuales pero amigos.
Sinceramente
les digo que la única misión de mi humilde escritura es la de compartir. Una
vez leí que escribir es crear, y leer lo escrito es como ser penetrado por esa
energía creadora. Realmente parece una obscenidad, pero escribir y leer es como
hacer el amor en otros planos sutiles. Cada vez que alguien escribe expulsa
cierta energía que alguien recoge en alguna parte. Esto no es más que una forma
de comunicarnos los unos con los otros e intermediar entre el mundo tangible y
el intangible.
Este
sitio es mi Hogar 3.0, y aquí seguiré reflexionando sobre la vida, mostrando
quién soy y cómo soy, exponiendo lo que pienso, lo que siento, sin tapujos. Amigos,
aquí seguiremos encontrándonos, éste es nuestro Universo 3.0.
Los
quiero.
Para mi siempre ha sido un placer leerte y lo seguirá siendo, te extraño mucho cuando te ausentas, pero soy paciente y espero tu regreso, sé que llevar un blog no es fácil y tienes poco tiempo entre tu trabajo y la enfermedad de tu mamá. Algunos de los primeros que llegamos a este sitio aún permanecemos aquí como Lily, Cary (aunque a veces se desaparece), Frank y por supuesto yo. Cuidate mucho linda y sigue esforzándote para no abandonarnos.
ResponderEliminarGracias amigo, no te preocupes que como ya dije no los abandonaré, seguiré aquí junto a todos ustedes.
EliminarY yo te quiero a ti por DIOS!!!!!!!!!
ResponderEliminarGracias.
EliminarMe gusta tu manera de decir las cosas y coincidimos en muchos puntos de vista. Este mundo cibernético nos une y crea un vinculo importante entre las personas. Es realmente increíble como podemos comprender y hasta encariñarnos con personas que no conocemos, pero sabemos que están ahí en algún lugar del mundo y que comparten nuestras mismas alegrías y sinsabores. Me encanto leerte nuevamente, como dice Peter cuando no apareces te extraño pero siempre vuelvo esperando que regreses. saludos que estes muy bien. Un abrazo.
ResponderEliminarGracias amiga, es cierto lo que dices y me alegro que no dejes de venir aunque yo desaparezca por unos días, que trataré de no hacerlo o al menos que no sea por tantos días. Un abrazo también para ti.
EliminarTienes una manera de decir las cosas, haces reflexionar, ayudas a entender, tocas el corazón y cuando hablas de amor hay pasión en cada línea, se siente y tienes razón cuando dices que acaricias la piel con palabras traviesas, de deseo, mojando los sentidos. Son muchos los que te siguen aunque algunos se han quedado en el camino, pero se han sumado otros muchos, y en algunos levantas tantas pasiones que hasta puedo decir que como el anterior Anónimo más de uno te ama a través de tus letras mujer intensa. No dejes de escribir, nunca lo hagas, aquí estaremos siempre.
ResponderEliminarGracias amigo, me alegra que mis palabras lleguen a todos y se sientan como tu dices. Y no creo que más de uno me ame como dices, simplemente creo que les gusta lo que leen y se emocionan. Y no te preocupes no dejaré de escribir si lo hiciera dejaría de ser yo.
EliminarMe ha gustado esta entrada por que invita a reflexionar a todos los que queremos tener un blog o a los que ya lo tienen…. Pienso que todos los que escribirmos un blog lo hacemos por que nos gusta escribir ,mejor o peor pero es algo que nos llena. Un beso y sigue escribiendo.
ResponderEliminarGracias Elina por tus palabras, si te gusta escribir hazlo, no tengas miedo, no pienses en si es malo o bueno, si gustará o no, simplemente escribe lo que piensas, lo que sientes y siempre encontrarás quien tenga los mismos sentimientos que tu y sepa apreciar tus letras.
EliminarHola amiga, en mi caso yo no solo te seguiré en tu blog sino espero estemos juntas toda la vida (que espero sea larga para seguir riendo y bastonearnos cada una jajaja) y en cuanto a lo que dice mi querido Peter no es tan así lo que sucede es que a veces leo los post muchos dias después o desde otras PC y no puedo contestar, pero tú eres uno de los que siempre estas con nosotros, un beso para ti y ya volveremos a hacer nuestros comentarios juntos ahora que la familia del blog crece. Nena sigue escribiendo para nosotros y le deseo mucha salud a tu blog, digo al nuestro :-))
ResponderEliminarGracias hermanita, yo también espero que estemos juntas toda la vida y que nuestra vida sea larga para seguir riéndonos y bastonearnos como tu dices. En cuanto al blog sabes que seguiré escribiendo como le dije a Frank, más arriba, si dejara de hacerlo dejaría de ser yo, y eso tu lo sabes mejor que nadie. Además tu sabes que tengo un libro que retomar y espero en algún momento sacar tiempo para eso también.
EliminarLa mayoría de las veces que te leo es como si leyese mi vida, lo que siento, lo que pienso, lo que vivo. Me agrada seber que hay alguien mas ahí que me entiende y que me hace entender que a pesar de todo la vida sonrie, que el sol siempre sale después de la lluvia. Gracias por escribir todo lo que escribes, te doy mi enhorabuena.
ResponderEliminarGracias a ti Julian por tomar un momento de tu tiempo no sólo para leerme sino para comentar. Me alegra saber que mis textos te sirven de ayuda y de compensación en medio de tantos sentimientos y vivencias. Y sí amigo, después de la tormenta siempre viene la calma, el sol siempre sale después dela lluvia, la vida siempre sonríe. Gracias nuevamente.
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