Cuando
la luna esta en todo su esplendor, la pasión se enciende entre tu y yo. Todo
gira alrededor de nosotros y los rayos de la luna llenan nuestros cuerpos de
luz y amor, nos estrechamos uno al otro con pasión. Cuando tú me amas te
entrego mi vida y mi alma, sin temor a equivocarme digo que aunque este amor
termine un día en el fondo seré tuya hasta la eternidad de mis días. Mi cuerpo
reconoce tus caricias y tus manos reconocen mi piel. Nosotros nos sentimos
antes de conocernos, nos abrazamos antes de abrazarnos y nos deseamos antes de
amarnos.
La
luna y las estrellas, nos miran sienten celos de nosotros.. de nuestro amor tan
pasional y frenético, de esta locura de amor… y la magia de la noche nos
acompaña, silenciosa, sedosa... En ti encuentro la paz, este amor va más de
tempestades y distancias… Cautiva en las alturas del goce, del vivir pleno y
apartado, entregados al placer del cuerpo, íntimamente unidos, arrebatados…
fundidos beso a beso, palmo a palmo, enfebrecidos los sentidos, estoy unida a
ti a tu ternura…
Me
envuelvo en tu piel, serpeando el calor de nuestros cuerpos hasta llegar
consumir el deseo que nos arrasa. Soy Tierra no fecunda en tus brazos, mar no
explorado… Me embriaga tu varonil aroma, la sutil suavidad de tus manos, tu
sentir pleno y entregado. Conozco tus detalles, tus encantos y tú conoces mi
cuerpo sin reparos. Me gusta que me sepas tuya cuando nos amamos tanto.
Poco
a poco nuestros cuerpos se funden en el fuego del deseo y la pasión. Hacer el
amor contigo es mucho más que eso, es sumergirse en un manantial de agua
cristalina y subir al mismo cielo o condenarse en el infierno... Tú piel contra
mi piel se pelean por ver quién resiste más pasión, amándonos de una forma
sobrehumana y dejando que venza el corazón…
Me
lleno de ti hasta la eternidad, me sacio hasta llegar a enloquecer, tus manos
son el eslabón que te une a cada poro de piel… Oleadas de placer, en cada
sentir, escalofríos de locura y pasión. Nuestros cuerpos se hacen uno… Mi boca
y tus labios devoran besos de locura y de salvaje corazón, la noche se viste de
madrugada y luego lentamente amanece. El sueño se apodera de nosotros, nuestros
cuerpos se abrazan, se duermen con el placer de estar juntos. Placer encontrado
y multiplicado. Contigo son así mis noches ¿Y que más puedo yo pedir? Si
mientras estés tú, el Sol seguirá saliendo con esas ganas.
Y
despertar junto a ti y aspirar el aroma de tu piel mientras miro tu cuerpo totalmente
desnudo dormir, es el momento que motiva mis deseos de vivir. Y el contacto de
mis labios humedeciendo los tuyos, despierta en nosotros nuevamente el más
primitivo de nuestros instintos. Somos presos del deseo y nuestra condena será
amarnos. ¡Cuánto tiempo compartiendo lujuria entre tus brazos! ¡Cuántos días
solamente a mi has pertenecido! De tu suave salvajismo me has colmado… Pecado
de amor, placer y morbo divino, deseo profano, pureza celestial. Yo fui creada
mujer... por ti... mi hombre.
Que intenso es sentir lo que escribes, aunque lo más bonito viene después del subidon de la pasión pero siempre es necesario seguir sintiendo que con esa persona el amor no tiene fin. Lo más bonito que pueda pasar en la vida es amar y ser correspondido.
ResponderEliminarEscalofríos he sentido yo al leer cada línea. Me siento lleno de amor y sentimiento al leerte… y esa condena de la que hablas la queremos todos, linda. Besos envueltos en ternura.
ResponderEliminarPeter amigo esta mujer nos va a matar, cuando escribe así por Dios, a ti te dio escalofríos yo estoy cautivo de sus palabras, de tanto sentimiento y pasión.
ResponderEliminarAmiga, es un verdadero canto de amor tu entrada, me encanta ese deseo profano y esa pureza celestial.
Puro amor y entrega, hermoso y como siempre un gustazo pasar por aca y poder leer todo lo que escribís. Besos
ResponderEliminar